Vuelvo a la carga con uno de los proyectos de jardinería y reciclaje que tenía pendiente desde hace algún tiempo. Como buena aficionada a los cactus y suculentas, me dedico a coleccionar diferentes variedades, y en la medida de lo posible, genero esquejes para que se vayan reproduciendo. Además, cuando visito lugares que tienen suculentas adultas, intento conseguir algún tallito para aumentar mi colección. Me fascina la facilidad de su reproducción, aunque he de decir que hay que tener calma, pues es un proceso super lento, abstenerse los impacientes!!
Este tipo de plantas, necesitan tener un recipiente ajustado a su tamaño, y cuando vi estos tarros de cristal supe que eran perfectos para plantar unas suculentas baby. Además, el contraste de la madera sin tratar me encantó. Los botes eran de paté, y estaba deseando que se acabaran, para poder reutilizarlos en este proyecto de jardinería.
Me fascinan las composiciones de suculentas en terrarios a modo de decoración, y aunque tengo pendiente embarcarme en uno de tamaño estándar, hoy os traigo estos “terrarios” en miniatura con un paso a paso para que veáis que fácil es aportar un toque de originalidad a un rincón de vuestra casa.
En primer lugar y ya que el tarro de cristal al ser reciclado no tiene orificio de salida para que drene el agua sobrante, vamos a colocar una base de piedrecitas. Esta base, además de decorar, servirá para recoger el excedente de agua. No obstante, debemos ser muy cuidadosos y regar muy de tarde en tarde, ya que conservará la humedad por mucho tiempo. En mi caso las piedrecitas son arena que me traje de mi viaje a Almería, así que también me sirve para recordar lo que me gustó aquel paraje.
En segundo lugar, llenamos de sustrato el recipiente. Si tenemos sustrato especial para suculentas/cactus, mejor que mejor, ya que este ayuda a evitar el exceso de humedad. En mi caso, he usado sustrato normal, nunca me ha dado problema con mis otros cactus y espero que en esta ocasión tampoco.
En tercer lugar, colocamos el esqueje de suculenta y cubrimos un poco más con sustrato. Yo he escogido tres variedades diferentes de suculentas de las que tenía en casa, dos de ellas ya habían enraizado, y la tercera aun no, pero ya no podía esperar más jeje.
Por último, decoramos la superficie del terrario con piedrecitas pequeñas, estas evitaran que la tierra se vuele, conservarán la humedad necesaria y además darán un toque adorable.
Ahora solo falta buscar un lugar bonito donde colocarlas y verlas crecer 
Espero que os haya gustado, y que si tenéis terrarios handmade en casa nos los hagáis llegar en las redes sociales etiquetando a @adoraideas
Un saludo y que tengáis un buen día
M.
