¿Quién no recuerda ese eslogan publicitario de una conocida marca de patatas? Pues bien, ese eslogan me viene hoy que ni pintado para presentar este post, ya que en él, vamos a reciclar un bote cilíndrico de patatas “tipo pringles” para darle este toque tan floral!!
Pero no solo en eso guarda relación el titulo con el contenido! Decoraremos el bote con la famosa técnica del decoupage que Dori os enseñaba la pasada semana, y es que es una técnica que engancha, y cuando la pruebas, ya no puedes parar!!
Los pasos para decorar con decoupage ya vimos que son bien fáciles, así que solo me detendré en los aspectos más significativos.
Materiales que necesitamos:
- Papel decorado
- Cola blanca
- Pincel
- Recipiente a decorar
En primer lugar escogeremos el papel decorado, recordad que no vale cualquier tipo de papel, tiene que ser poroso para que absorba la cola. En mi caso seleccione una servilleta decorada con motivos florares, rosas más concretamente, que compré en Ikea. En sitios como este, suelen tener muchas variedades de servilletas bonitas y a muy buen precio que pueden servirnos para manualidades de diversos tipos.
En la foto no se aprecia, pero cuando desplegué la servilleta para separar la capa decorada, me lleve una grata sorpresa, y es que cada cuarto de la servilleta tenía una rosa diferente, cosa que hizo que pudiera jugar con los tamaños a la hora de diseñar el bote.
En segundo lugar, es recomendable pintar el bote con un color que no desentone con nuestras servilletas. De esta forma taparemos los letreros y fotografías del cartón, y cuando apliquemos la servilleta, que al ser tan fina suele trasparentarse un poco, no se verá nada que afee el diseño final.
Usé pintura de color rojo, ya que en el bote predominaba ese color. Y aunque al principio parecía que no destacarían las flores al ser rosa oscuro, luego quedaron genial. Como veis en la foto, las chicas Adoraideas aprovechamos los días de verano para reciclar y hacer manualidades jeje.
Mientras la pintura se iba secando, me dediqué a recortar y recortar flores de varias servilletas. Aunque es preferible recortarlas con las manos para que los bordes queden más porosos y se adhieran mejor al cartón, podéis ayudaros con unas tijeras para las piezas pequeñas.
Cuando tuve todas las partes preparadas, comencé a pegar con la cola blanca y el pincel las rosas sobre el bote. Comencé pegando una rosa grande en la parte central del tarro, y después fui cubriendo toda la superficie como si de un puzzle se tratara, tapando cada huequito que quedaba entre flor y flor, con tallos verdes o flores pequeñitas.
Cuando terminé de cubrir toda la superficie, deje secar el bote completamente.
Si se desea, se puede barnizar para que con el paso del tiempo no se deteriore, pero todo depende del uso que se le vaya a dar al objeto.
Se me ocurren multitud de opciones para darle una nueva vida, como por ejemplo, envoltorio regalo para unas galletas caseras, porta pinceles o lapicero, o incluso para guardar los brazaletes.
Y enganchada a la fiebre del reciclado y del decoupage, he hecho una primera prueba de aplicar la técnica a recipientes de vidrio. He decorado unos tarritos de conserva que han quedado ideales. Pero eso ya os lo enseño otro día jejeje. Si no te los quieres perder, suscribete al newsletter, o dale a “me gusta” en nuestra página de facebook.
Un besico
M.
