Hoy os traigo uno de mis retos conseguidos. Desde siempre me han gustado las denominadas “Ruffle Cakes” y os preguntareis de que se trata, ¿no?
Son unas tartas decoradas con buttercream, fondant, o algo similar y con forma de volantes y fruncidos. Pero como una imagen vale más que mil palabras, aquí os traigo algunas fotos de las diferentes formas y estilos. Están sacadas de Pinterest, haciendo una búsqueda por el término “Ruffle Cake” podréis encontrar estas imágenes y muchas más.
Mi tipo favorito es este último. Se hace con butter cream y mucha maña con la manga pastelera. Es necesario tener una boquilla de tipo pétalo, que son esas que tienen una parte más ancha, y la otra bien finita. Por suerte yo tenía una así que ya solo necesitaba una excusa para ponerme manos a la obra.
Cuando tengo cumpleaños o eventos familiares me gusta llevar el pastel, y hace poco tuve una celebración, así que pensé que tenía que estrenarme.
El bizcocho lo hice de brownie con la receta que ya os enseñé aquí. Es infalible y siempre triunfa, y no me la quería jugar. Como eramos pocos comensales, solo hice uno. Pero la próxima vez que haga la ruffle cake, haré dos bizcochitos para hacer la tarta mucho más alta.
La receta del buttercream es la básica que llevo haciendo toda la vida, pero con aroma de plátano y colorante amarillo, y es bien fácil, se mezcla mantequilla y azúcar glas a partes iguales y se bate bate bateeeeee.
Primero hay que cubrir toda la tarta con buttercream y meter a la nevera unos minutos para que endurezca, y después pasamos a decorar con la manga pastelera. Para hacer los plisados del lateral de la tarta, colocaremos la manga en posición vertical, y con la parte de la boquilla gruesa hacia el bizcocho. Apretando de manera uniforme, haremos un zig zag del ancho que nos guste hasta llegar a la parte de arriba de la tarta. Repetiremos este proceso cubriendo todo su diámetro.
La parte superior se puede hacer como una espiral, pero yo preferí marcar las porciones para que luego fuera más fácil cortar y servir. Para ello marqué con un cuchillo las 8 porciones a modo de pizza, y fui haciendo en cada una, el zig zag desde el exterior al centro cubriendo toda la porción.
Como la tarta era para un cumple, y quedó un poco pastel, decidí aportar más color con un banderín de papel hecho a mano que ponía FELICIDADES 
Si queréis saber como hacer el banderín, podéis entrar aquí.
Aunque las fotos se ven un poco mal (las hice a prisa y corriendo porque llegaba tarde a la fiesta) el resultado fue espectacular y gustó a todo el mundo. Además, seguro que la próxima queda mucho mejor!
Espero que os haya gustado y os animéis a practicar con la manga pastelera. Y si no te quieres perder ninguna novedad, no dejes de visitar nuestra página de facebook.
Un saludo
M.